¿Qué DESCUBRIR de un buen Director y líder de una PYME?

En nuestra trayectoria nos hemos topado con muchos tipos de empresas y negocios, empresarios, directores y dueños de pequeños negocios en crecimiento. Hemos tenido aciertos y desaciertos en el camino, y la gran mayoría de nuestros errores tienen su origen en una lectura errónea del perfil del dueño o líder de la empresa.

El no interpretar adecuadamente el tipo de liderazgo y dirección que ejerce la persona que toma las decisiones finales, nos ha llevado a recorrer caminos incómodos y vernos en la necesidad de reconocer fallas que no corresponden a nuestras responsabilidades.

 Todo mundo busca culpables cuando las cosas no salen bien. Debido a esto, hemos desarrollado un proceso exhausto de filtrado de nuestros clientes, comenzando con la persona que decide contratarnos y quien toma la decisión final sobre las estrategias.

En este largo camino de creación y desarrollo continuo de procesos para mejorar los resultados en las empresas a través del marketing, hemos corroborado que los mejores indicadores para medir el quehacer de un buen director y dueño de negocios son los siguientes:

•  El empresario debe de contar con un plan. No tiene que ser el mejor plan, tampoco debe ser correctamente estructurado, pero sí debe contar con uno; hacia dónde va la organización y los resultados que busca son claves.
•  Una visión definida de lo que desea alcanzar, en lo personal y para su organización.
•  Dentro de sus planes se encuentra el desarrollo y crecimiento de su gente. Siempre busca construir y fortalecer su organización.
•  Reconoce la justa medida de su involucramiento y su tiempo en las tareas. Delega y tiene confianza en su equipo y colaboradores (es imposible que esté en todo y tome todas las decisiones).
•  Manejo de tecnología. No debe dominarla, mucho menos ser un experto, pero sí debe saber sacarle provecho a las herramientas mínimas indispensables que le ofrecen los dispositivos móviles. Aquí es donde comienzan los problemas de comunicación.
•  Administración de su tiempo. Controla su tiempo a través de una agenda y, sobre todo, respeta el tiempo de los demás.
•  Reconoce el valor del análisis y pensamiento estratégico. Son prudentes, analizan el valor de cada resultado, saben que para llegar a un objetivo se deben considerar muchas variables.
•  Toman decisiones de forma estructurada. No es al azar, no se dejan llevar por impulsos o rachas, escuchan y les dan valor a las recomendaciones.
•  Se rodean de personas con más y diversos talentos que los propios.
•  Siempre buscan el bienestar del equipo. Aunque tienen ambición y objetivos personales, siempre procuran obtener beneficios para todos en su justa medida.

Podemos extender la lista, no hay límite en las acciones y cualidades que debe contar y desarrollar un buen dueño de negocio o director de una organización. En resumen, un buen director debe combinar una serie de habilidades, virtudes y capacidades que le permitan crecer y sumar talentos a sus proyectos.

En nuestra experiencia, estos son algunos de los elementos que debemos analizar y evaluar sobre el liderazgo de una empresa que desea contratarnos. No necesariamente todos nuestros clientes deben contar con todos los atributos, pero si reconocemos el punto de partida y las capacidades que debemos desarrollar y apoyar de nuestro cliente, juntos lograremos provocar un resultado constante y sostenido en el tiempo.